¿Alguna vez te has cuestionado sobre tu capacidad de dejar las cosas para última hora?, Pues quiero decirte que este articulo está procrastinado hasta el último segundo de su publicación y por está razón hoy, gracias a la conversación que tuve con un amigo en un almuerzo casual, descubrí que somos muchas las personas en el mundo padeciendo de lo mismo, así que en mi búsqueda también incansable por tener la razón (que eso puede ser otro artículo) vengo a contarles cómo aprovechar este síndrome de procrastinar y no morir en el intento.
En lugar de luchar contra ella constantemente, aprender a utilizar la procrastinación a tu favor puede transformarla en un aliado en tu jornada laboral. Este no es un artículo científicamente comprobado, solo es un análisis detallado de mi experiencia y de muchas luchas intentando dejar el vicio de procrastinar y morir en el intento
Cuando tengo que hacer una tarea demasiado grande intento no convertirla en un problema del mismo tamaño, por esta simple razón cuando el plazo de la entrega es igual de grande que la tarea, divido esta en versiones mini de lo que tengo que hacer, me vuelvo estratégica y en lugar de decir tengo que hacer un informe, divido mi lista de pendientes así, un día la tarea es “sacar algunas cifras importantes para el informe”, la siguiente tarea, que seguramente será realizada otro día es “organizar la presentación” y para ser sincera estas pequeñas tareas ayudan a que el día que realmente tengo que presentar el informe todo sea más simple y tenga todo a la mano para solo sentarme a escribir
Otro tip de persona muy procrastinadora va relacionado con esa preocupación que se genera de saber que tienes que hacer algo y no lo haz hecho, entonces intentas descansar, haces mil cosas alrededor de todo, menos de hacer esa tarea que estás evitando, pero en medio de ese proceso de evitarla (porque en el fondo sabes que no la quieres hacer) y el hecho de no quererla hacerla, dejas de disfrutar las otras cosas que estás haciendo y aunque suene un consejo muy básico, mi estrategia está relacionada con el autoconocimiento. Para esto quiero que te hagas algunas preguntas:
Primera pregunta: ¿Alguna vez tu procrastinación hizo que no cumplieras con alguna responsabilidad?
Si la respuesta es no, entonces tienes un talento para el trabajo bajo presión, reconócelo, pero, si la respuesta es sí, entonces tenemos un problema y este artículo no debe ser un incentivo para seguir dejando las cosas para última hora, pues mi búsqueda incansable para convivir con la procrastinación va más allá de justificarme, lo que intento es que juntos reconozcamos si procrastinar puede convertirse en un aliado para algunos
La siguiente pregunta es: ¿Alguna vez entregaste mal una tarea por dejarla para el último momento?
Si la respuesta es no, entonces definitivamente este síndrome es tu aliado, porque la presión te vuelve creativo y permite que tus ideas fluyan en el momento en que te dispones a hacer tu trabajo, i la respuesta es sí, entonces es momento de replantearte, y reconocer que en definitiva, la procrastinación no es tu aliado y necesitas aprender algo más sobre gestión del tiempo
Por último, algo que es muy importante en este proceso de no padecer la procrastinación, sino más bien disfrutarla es: ¿Te sientes mal y te quejas cada vez que debes afrentar las consecuencias de la procrastinación?
Explicación: cuando te hablo de consecuencias me refiero a: tener que trabajar algunas horas extra, quizá no tener tus 8 horas de sueño, cancelar algún plan de diversión por cumplir con esta tarea, este punto es importante porque recuerda que no queremos justificarnos, la responsabilidad, el deber cumplido y el respeto por lo que hago siguen siendo la guía para diferenciar si puedo disfrutar o padecer la procrastinación, entonces, si tu respuesta es sí, es momento de buscar un artículo que te ayude a “combatir” la procrastinación, pero si la respuesta es no, estás listo para que, en el momento de elegir hacer otras cosas, como salir con amigos, ver una película o hacer cualquier otra cosa cuando deberías estar haciendo alguna tarea pendiente, no sufras tanto y no te mates la cabeza pensando que estás aquí, pero deberías estar allí, porque si la respuesta a las 3 preguntas fue no, estás listo para disfrutar de esta forma de trabajo llamado “Soy procrastinador por elección”.
